Cuando un comprador de vivienda recibe una Tasación Inmobiliaria siempre tiene curiosidad en que aspectos se fija un Tasador Inmobiliario.
Pues el dato fundamental es la ubicación del propio inmueble. El barrio en que se encuentra una vivienda determina su valor en un alto porcentaje.
Por un lado se valora el barrio y pero también la ubicación de la vivienda dentro de ese barrio. No es lo mismo que esté en una calle principal que en una más secundaria.
También se tiene en cuenta la ubicación de la vivienda dentro del edificio. No es lo mismo una vivienda interior que una exterior, ni si tiene buena orientación o no, ni si tiene luz natural o si es oscuro. También es importante si la vivienda hace esquina y cuantos metros lineales de fachada tiene (a más fachada, más valor).
Una vez dentro del edificio se valora su antigüedad, si tiene ascensor o no, el aspecto y estado de conservación de las zonas comunes. Si tiene garaje dentro de la propia finca, incluso si tiene trastero.
Llegando a la vivienda se valora su distribución, si la zona pública está independizada de la zona privada o no… La amplitud de las diferentes estancias, si tiene uno o dos baños…, si tiene balcones, terrazas, o patio…
Pero también los acabados y su estado, e instalaciones importantes como la calefacción o el aire acondicionado.
Todos estos datos permiten al tasador tener un conocimiento preciso de la vivienda y comenzar a trabajar en la tasación.