A la hora de repartir una herencia, en muchos casos, los herederos desconocen el valor actual de los bienes que van a repartir. Sobre todo si se trata de bienes inmuebles: chalets, pisos, locales, garajes… Pues su valor fluctúa en función de la especulación inmobiliaria.
Existen varias fórmulas para dar valor a esas propiedades
Valor Catastral
Catastro otorga un valor a todas y cada una de las propiedades inmobiliarias que existen en España, tanto rústicas como urbanas. Si bien lo actualizan periódicamente, no siempre se encuentra actualizado.
Además, debemos tener en cuenta que ese valor está pensado para cobrar impuesto como el IBI, no para dar un valor real de compraventa.
Valor Autonómico
Las Comunidades Autónomas también poseen bases de datos para calcular el valor de una propiedad. De hecho lo utilizan para cobrar impuestos como el de Plusvalía (se lo cobran los ayuntamientos al vendedor de un inmueble) o el ITP – Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (lo cobra la comunidad al comprador de un inmueble); siendo muy común una discrepancia importante entre el precio de compraventa y este valor.
Portales Inmobiliarios
Muchos portales inmobiliarios ofrecen la opción de valorar el piso que vas a “colgar”.
Tienen la característica de que al basarse en los anuncios que ellos mismos publican, los valores que ofrecen suelen estar sobrevalorados, pues es muy común que los vendedores tiendan a poner un precio por encima del que luego están dispuestos a vender y por el que realmente se cierran las ventas.
Valoraciones On-line
En los últimos años han proliferado mucho las valoraciones on-line, generalmente ofrecidas por las entidades bancarias. Si bien en origen eran de acceso libre y gratuitas, cada vez más se tiende a que este servicio solo esté disponible únicamente para los clientes de la entidad bancaria que lo ofrece o incluso a que sea de pago.
Este sistema, basado en el big-data, nos ofrece una visión general del valor medio de un inmueble en una zona, pero no tiene en cuenta la singularidad del mismo; como el hecho de que sea interior o exterior, que tenga ascensor, la altura del piso (no es lo mismo un primero que un sexto…), el estado de conservación del edificio y del piso… Por tanto nos sirve para darnos una orientación, pero no para darnos un valor preciso.
MVI (Metodología de Valoración Inmobiliaria)
El Colegio Oficial de Registradores posee una herramienta de valoración inmobiliaria muy buena, basada en los datos que aportan los compradores y vendedores cuando firman ante notario una escritura de compraventa.
Por tanto se trata, también de un sistema de big-data, pero con datos de mucha calidad.
Este sistema, siendo el que trabaja con los valores más certeros de todos, también adolece de no contemplar la singularidad de cada propiedad, al igual que todos los demás.
Valoración realizada por Inmobiliaria
Otra opción que tenemos es visitar las inmobiliarias de la zona y que nos orienten sobre el precio del piso o local.
En función de la valía y experiencia de quien regente esos negocios podemos obtener un valor preciso o uno distorsionado.
Si se trata de profesionales, y sobre todo, si llevan tiempo en la zona y tienen un volumen importante de trabajo (que vendan al menos 20 propiedades al año) conocerán bien la zona, incluso cada edificio y podrían ser de gran ayuda.
Si bien es cierto, que suelen tener la picardía de sobrevalorar las propiedades, porque es muy común que los herederos terminen llevando el piso a una inmobiliaria a que se lo venda. Y suelen llevárselo a aquella que les dio el precio más alto.
Tasación Inmobiliaria
Si lo que realmente deseamos es conocer el valor real de un bien inmueble lo mejor es contratar los servicios de un tasador inmobiliario. Pues visitará el inmueble y ofrecerá un valor basado en las condiciones concretas de esa propiedad. Además, al tratarse de profesionales colegiados, sus informes poseen valor legal y se pueden utilizar en todo tipo de trámites administrativos (Hacienda, Seguridad Social) o legales (juzgado).
Una Tasación Inmobiliaria es mucho más barata de lo que crees
Su valor parte de 180 € IVA incluido; más barato incluso que la valoración que puede darnos una inmobiliaria. Posee el respaldo de un técnico y su colegio profesional; y posee plena validez para presentarla ante cualquier administración o ante el juzgado.