¿Sabes para que sirve una tasación inmobiliaria para garantía hipotecaria?
Cuando vamos a comprar una casa y no disponemos de todo el dinero que cuesta pedimos un crédito. Pero no un crédito normal, sino un crédito hipotecario o hipoteca.
¿En qué se diferencia un crédito de una hipoteca?
Una hipoteca es un crédito cuyo aval es el propio bien que está destinado a comprar.
Me explico: cuando vas a comprar una casa, la propia casa que compras sirve de aval para el crédito que pides. Por eso en los años más duros de la crisis mucha gente perdió su vivienda, porque la vivienda servía para avalar el crédito con el que se pagaba; y al no poder hacer frente a las cuotas, la gente perdió sus casas.
¿Pero, entonces, es bueno pedir una hipoteca para comprar casa?
Pues bueno o malo, no sabría decir… Pero lo cierto es que si no cuentas con suficiente dinero para comprar tu casa, no vas a tener muchas más salidas…
Para responder a un crédito de ese volumen, cualquier banco te va a pedir un aval, incluso en el caso de que seas funcionario.
El aval no tiene por qué ser la propia vivienda que vas a comprar, podría ser que te avalasen tus padres o hermanos o que avales con otra propiedad que tengas (fincas rústicas, otras viviendas, etc..). Pero lo corriente es que, cuando vas a comprar tu primera vivienda, no tengas ninguna otra propiedad y que tu familia tampoco cuente con posibles como para avalarte; por tanto, no te quedará más remedio que solicitar una hipoteca.
La tasación inmobiliaria para garantía hipotecaria
Como la vivienda que vamos a comprar es el aval que sostiene el crédito que pedimos, el banco tiene que asegurarse que efectivamente, esa vivienda que va a financiar vale la cantidad que pedimos. Pues, en el peor de los casos, si tuviese que embargarla, debe tener la garantía de que va a recuperar el dinero que te dio.
Básicamente la tasación es una comprobación.
Por eso, generalmente, los bancos suelen enviar a tasadores de su confianza a evaluar las viviendas, pues están muy interesados en que ese trabajo se haga de manera minuciosa. Al fin y al cabo, en caso de que todo salga mal y terminen embargando la vivienda, quieren tener la garantía de que al vender la vivienda, recuperen el dinero.